Poetas de todo el estado unen sus voces por la causa de la violencia de género.

 

Editorial Quadrivium edita el poemario “Mujeres con voz” a cargo de Luisa López G. y Fran Picón. Se trata de un recopilatorio donde participan poetas prácticamente de toda la geografía española. El texto, homónimo del grupo de mujeres poetas coordinado por Luisa López G. en torno al problema de la violencia de género, es un alegato contra el silencio que esconde esta lacra social. La obra se presentará en diversos puntos de la península. Esta gira, promovida por Editorial Quadrivium, contará con la presencia de artistas músicos comprometidos en esta lucha. Los fondos recaudados se destinaran a financiar proyectos de la Fundación Ana Bella. Tiene todo su sentido, pues, la cita de Melinda Gates: “Una mujer con voz es por definición una mujer poderosa”.

 

La violencia, principalmente en el entorno familiar, es algo que, si bien ha estado presente siempre, desde hace tiempo –pero especialmente en las últimas décadas–, ha ido ganando atención paulatina. Actualmente la sociedad ha tomado plena conciencia del calado de esta cuestión, así como de los perniciosos efectos que tiene principalmente para la persona que lo sufre, pero también para la sociedad en general. El elemento basal es el silencio, precipitado por miedos y sentimientos diversos, ya que lo hacen invisible, al tiempo que lo enquista.

Así mismo, es de suma importancia, y se ha destacado reiteradamente, que el éxito en esta contienda radica en aunar los esfuerzos de todos los actores y agentes sociales. Las soluciones, complejas, exceden el ámbito de lo individual para infiltrarse en lo comunitario. Este es el propósito de la Fundación Ana Bella. Un proyecto que toma a su cargo, entre otros el difícil reto de la rehabilitación de quienes han sufrido durante años los efectos perniciosos de una relación truncada. El valor añadido de esta fundación consiste en reconducir el estigma y los efectos del maltrato hacia metas más creativas y socialmente aceptadas y valoradas. Su ejemplar trabajo ha merecido la atención de importantes firmas que colaboran en el proyecto.

 A nivel social muchas han sido las iniciativas que se han llevado a cabo. Concretamente en el ámbito de la cultura, y específicamente en la literatura, merece nuestra atención el colectivo “Mujeres con voz”, formado inicialmente por una veintena de mujeres con el objetivo de anudar su producción poética a esta causa. El nombre que lo define no puede ser más oportuno, desde el momento que incide en uno de los principales motivos subyacentes: romper el silencio, que es tanto como salir de un mundo de penumbras a la luz, a través de la palabra.  En la actualidad es un grupo heterogéneo de mujeres y hombres animados por el deseo de difundir la palabra –la poesía reivindicativa–, contra cualquier tipo de violencia, asumiéndose así como agentes de sensibilización y cambio desde el momento que se ponen palabras a lo que subyace oculto. Oficio de poetas.

En cierto modo, éste también es el objetivo de la Fundación Ana Bella. Un proyecto reconocido por el ministerio de Sanidad, Igualdad y política social, y que ha recibido sendos galardones por su labor. Y lo hace de forma novedosa y original a la par, a través de una red de mujeres solidarias que a su vez han sido víctimas (ahora son supervivientes): convirtiendo esa energía negativa, en fuerza positiva de empatía y productividad.

Aunque es un lugar común, en Editorial Quadrivium estamos convencidos de que la producción cultural es sinónimo de progreso y cambio en los más diversos registros de la humanidad. Nuestro objetivo, pues, es volcar a la sociedad el fruto de esta labor, y lo hacemos colaborando con quienes toman a su cargo la ardua tarea de lidiar con una realidad ya de por sí compleja.  “Mujeres con voz” se presentará en un recorrido poético musical por diversos puntos de la geografía española, con el propósito de recaudar fondos con los que apoyar las iniciativas de la Fundación Ana Bella.

Pero esta labor no podría llevarse a cabo sin medios económicos con los que sufragar los costes que supone poner en marcha, entre otros, mecanismos de inserción social y laboral. Es aquí que cobra especial relevancia nuestra propuesta: una manifestación efectiva y tangible para poder llevar a cabo sus fines. De esta manera, la solidaridad no sólo se queda en un gesto pasivo, en una intención; sino que, al apoyar esta iniciativa, la sociedad misma está colaborando de forma muy activa en la solución. Esta es la responsabilidad de cada uno frente a un problema que no es ya individual, sino que está escrito en la piel de la sociedad misma.

 

Editorial Quadrivium.